_La alumna de octavo motivó al establecimiento a adquirir material educativo para estudiantes con problemas de visión y así ayudar a su inclusión y autonomía.

Khaterine Paineo Paineo es no vidente, por ello nada le ha sido fácil. Ingresó el año 2011 al primero básico del Colegio Jean Piaget, y gracias a las políticas educacionales del colegio, el trabajo de sus profesoras y el esfuerzo propio, hoy, ocho años después Khaterine se prepara para finalizar la Enseñanza Básica incluida en la comunidad escolar y en la sociedad. 

“Mi vida en el colegio es de una niña normal, paso mucho tiempo arriba, en el segundo piso donde estoy (clases); no me gusta caminar mucho, soy un poco regodeona, y me enojo con facilidad (…) Soy una niña tímida, me pongo nerviosa, mis compañeros me molestan pero en buena onda, son súper simpáticos conmigo”, señala Khaterine. 

Entregar educación de calidad es responder a las necesidades educativas de todos sus alumnos y alumnas, sin distinciones. Es por ello que la inclusión es parte importante de las políticas de la Corporación Municipal de Rancagua. El Programa de Inclusión Escolar (PIE) es una herramienta para que los establecimientos trabajen en este importante ítem: justamente lo que hace el Colegio Jean Piaget de Rancagua.

La inclusión es parte de los sellos de este colegio del sector poniente, y esto se ha acrecentado en los últimos ocho años. Y claro, desde que la “Khati” llegó al colegio no han hecho más que trabajar por incluirla con el resto de sus compañeros. Para ello el establecimiento se ha preparado con una profesora de educación diferencial (también no vidente), quien ha gestionado material especial para Khaterine: calculadoras sonoras, balones deportivos con campanas, juegos de mesa especiales, entre otros. Pero uno de los grandes logros fue la impresora de braille de marca Columbia que sirve para imprimir material escolar. 

Pero todo llega a su fin y Khaterine deberá dejar el colegio a fin de año, para ingresar a la Enseñanza Media. “El próximo año, cuando me vaya, voy a extrañar mucho a mis compañeros, porque los conozco hace mucho. Bueno, los voy a extrañar a todos, a los profes también, porque siempre han estado conmigo. Los profesores hacen las cosas por mi bien, estoy muy agradecida de todos. A mis compañeros los voy a recordar como ‘buena onda’, y a mis profesores como exigentes, medio enojones, pero simpáticos”, señaló la estudiante de octavo que pretende dedicarse a las artes sonoras: “a mí me gusta mucho la música, el cantar, todo lo que es la actuación, eso me gusta hacer. En el caso de que decida ser cantante tendría que buscar una academia de canto”.

COLEGIO ESPECIALIZADO 

Si bien el Colegio Jean Piaget no nació como especialista en recibir a estudiantes con problemas de visión, gracias a la permanencia de Khaterine el establecimiento se especializó en recibir a alumnos y alumnas con estas capacidades diferentes, y así incluirlos. 

La profesora de Khaterine, Carolina Altamirano, indicó que “yo trabajo con Khaterine una cantidad de horas a la semana. La apoyo en el aula común, asisto a algunas clases con ella, la oriento, le ayudo a tomar apuntes, para que se conecte; pero siempre que trabaje de forma independiente, que pueda escribir de forma ordenada, adaptando sus materiales. También la atiendo en la sala de recursos donde trabajamos matemáticas, que es lo que más le cuesta, y actividades de la vida diaria, donde trabajamos la autonomía y el uso de herramientas”.

Respecto a la preparación del colegio, la profesora de educación diferencial señaló que “nosotros solicitamos varios materiales para facilitar el aprendizaje de Khaterine, ella está en un curso bien avanzado por ello necesita material braille, por ello pedimos una impresora braille para imprimir las pruebas y el texto de estudio. Tenemos también material para matemáticas, ábacos, calculadoras parlantes, material para educación física con pelotas sonoras, y juegos de mesa adaptados para que los conozca. Nosotros consideramos que todas las áreas son importantes para el desarrollo”, agregó la profesional, finalizando que “ella está insertada en la comunidad escolar en un altísimo porcentaje, porque ella es otra más del curso, los compañeros la tratan como una compañera más, incluso le hacen bromas, participa al mismo nivel de sus compañeros; los profesores están preparados para ello”.

INVITACIÓN A OTROS ESTUDIANTES

Con la partida de Khaterine, no solo quedarán tristes por no tener a tan querida alumna, sino que también tendrán una posibilidad para ayudar a otros estudiantes de Rancagua y alrededores. La coordinadora del programa PIE del Colegio Jean Piaget, Patricia Osorio, realizó una invitación para todos los niños con problemas de visión, ya sea no videntes o con visión reducida. 

“Con mucha pena nos despedimos de Khaterine que termina el octavo básico, y hemos adquirido muchas herramientas y tenemos toda la voluntad de seguir trabajando con los no videntes o con baja visión, entonces: le hacemos un llamado a la comunidad rancagüina a que si conocen algún niño o niña (con estas condiciones visuales), se vengan a estudiar con nosotros; nosotros los esperaremos con las puertas y el corazón abierto, con todas nuestras ganas para que se incluyan en la sociedad, para que adquieran autonomía”, indicó la educadora diferencial. 

Por último, Patricia Osorio agregó que “nosotros trabajamos hace ocho años con una estudiante no vidente en el Programa de Inclusión Escolar, y siguiendo los sellos de inclusión nos hemos preparado materialmente y con recursos humanos. Nos hemos ido perfeccionando, adquiriendo material, todo para incluirla en el colegio y en la sociedad”.